El atacante de 25 años regresa a Estados Unidos para vestir la camisa de Chicago Fire
CHICAGO – Desde su debut profesional con Orlando City en el 2018, Chris Mueller se convirtió en una de las grandes promesas de Major League Soccer. Un hombre fuerte y rápido que puede jugar por los costados y que también sabe manejarse dentro del área, son ingredientes importantes para un jugador joven. Esas fueron muestras constantes de Mueller temprano en su carrera.
Luego de cuatro temporadas y con más de 100 partidos disputados en el torneo local, Mueller decidió emprender su primera prueba fuera de Estados Unidos. Estaba claro que el ambiente sería distinto a lo que estuvo acostumbrado a nivel universitario y luego en Orlando, adonde los aficionados son exigentes pero ni eso pudo prepararlo para lo que vendría.
“El fútbol en Escocia es prioridad uno para todas las personas. Si las cosas no te están saliendo bien es difícil distraerte de cualquier otra forma. Todos los ojos están puestos sobre ti y si no va bien la gente te lo deja saber, es otro tipo de presión”, dijo Mueller recientemente.
Efectivamente, los futbolistas en Estados Unidos viven en un paraíso. Algo que los jugadores de experiencia en Europa al llegar a la tierra del tío Sam disfrutan a más no poder. La MLS y las otras ligas profesionales del país crecen día a día pero sus aficionados tienen otras actividades y otros deportes a los que se pueden dirigir con -algunas veces- mayor relevancia.
Es decir, si el Chicago Fire pierde una final y al día siguiente ganan los Cubs o los White Sox en la MLB, la frustración se termina rápido. Los aficionados se cambian la camisa a diario por los equipos de su ciudad y la pasión por el fútbol no alcanza la dimensión que si tiene en otras partes del mundo, con la mayoría de los aficionados, siempre existen gratas excepciones.
Volviendo a Mueller, el goleador tiene sus condiciones y aunque no hay duda que regresar a MLS tan pronto significa un paso inesperado, estar cerca de su familia puede ser esa inyección de ánimo necesaria luego de un proceso extenso de aprendizaje en Escocia. Si la MLS es su límite no tiene nada de malo, en el pasado ha sido un jugador agradable a la vista y de tener otra oportunidad en el extranjero, sabrá a lo que se enfrenta.