Los Miami Dolphins inician la temporada con derrotas consecutivas, la más reciente por 33-27 en otra tarde grandes frustraciones ante New England.
Son las dos primeras semanas de la temporada regular de la NFL y los Miami Dolphins ya están en caída libre.
En su debut en casa y frente a unos New England Patriots que también venían de caer en el primer partido de la temporada, han sumado otra dolorosa derrota.
En la recta final del partido, Tua Tagovailoa volvió a sus problemas del pasado y con una mala entrega prácticamente selló el partido a favor de los visitantes.

«Fue frustrante no tener la comunicación adecuada», comentó Tagovailoa. «En la intercepción solamente quería hacer una jugada en cuarto intento para darle una oportunidad al equipo».
«Debemos aprender de este partido y seguir adelante. Veremos el video mañana y empezaremos a conocer el plan de cara al próximo partido».
Tagovailoa, 27 años, terminó el partido con 315 yardas y dos intercepciones, se apoyó en el juego terrestre con Davon Achane para luego incorporar el juego área.

Todo funcionaba a medio vapor hasta que en la recta final del partido colapsó.
Desde el principio, Miami se vio abajo por 12 puntos gracias a dos fallos del venezolano Andrés Borregales en puntos extra. El escenario era medianamente favorable para Miami.
El equipo de Mike McDaniel encontró respuesta y se fue al medio tiempo abajo por un punto.

«Es muy frustrante, nos golpeamos nosotros mismos», dijo Tyreek Hill. «Al final del partido las operaciones no fueron buenas, teníamos muchos jugadores en el terreno al final y como líderes nosotros debemos controlar esas situaciones».
«La presión que sentimos es una oportunidad, tenemos los jugadores adecuados y vamos a intentar mejorar en estos días. Nadie quiere estar 0-2 pero esto debe servir como motivación».

Ambos equipos regresaron patadas en el cuarto período, primero fueron los Dolphins por medio de Malik Washington con 74 yardas, inmediatamente después llegó la respuesta Patriots para darle vuelta al partido con una espectacular jugada de 90 yardas de Antonio Gibson.
El golpe emocional en agregado a las dificultades de Miami fuera del terreno de juego fueron suficiente para dejar a los locales sin posibilidades.

«Tuvimos la oportunidad de ganar el partido y nosotros fuimos nuestro peor enemigo», afirmó Mike McDaniel. «Le dije al equipo que fue una buena respuesta después de la manera que iniciamos, me estoy dando cuenta del equipo que estoy dirigiendo».
«Es frustrante porque tuvimos control del partido y nos vamos con el mal sabor de boca, tendremos otra oportunidad el jueves».

Por si fuera poco, Miami está corto de tiempo para preparar el partido del jueves frente a los Buffalo Bills, uno de los candidatos al Super Bowl en la presente temporada.



