Lionel Messi marcó el único gol del partido en la derrota 4-1 de Inter Miami frente a Minnesota United por la Jornada 12 de la temporada regular de MLS.
Inter Miami está en problemas. El equipo dirigido por Javier Mascherano ha recibido 14 goles en sus últimos cinco partidos.
Los bonos defensivos que habían significado buenos resultados en el inicio de temporada, son cosa del pasado.
En agregado a los problemas defensivos, Inter Miami hace de Lionel Messi un jugador inefectivo.
Con todo el talento que tiene el campeón del mundo, ya no está en una etapa en la que pueda cargar con un equipo constantemente.
El planteamiento de Mascherano es un festival de malas opciones para Messi, quien sigue siendo el mejor del equipo y quien cada vez se le mira más frustrado por el pobre acompañamiento.
Hoy, en el único gol del partido, Jordi Alba finalmente pudo combinarse con Messi y lo hicieron ver tan fácil que cualquiera se imaginaba que la remontada estaba en camino.
No fue el caso, fue la única conexión con Messi dentro del área en un partido de más del 70 por ciento de posesión.
Es decir, ninguna de las variantes de Mascherano rindieron fruto, lo intentó casi todo dentro de su propio arsenal.
En conferencia de prensa, Mascherano justificó el planteamiento con tres hombres de marca gracias a una migraña que impidió que el haitiano Fafa Picault fuera de la partida.
El jugador que estuvo ausente en partidos clave por la Concachampions frente a Vancouver, hoy era la solución y el causante para un cambio drástico.
Sin embargo, Inter Miami pasó de un 4-3-3 extraño a un 4-4-2 tradicional. Después de todo, la ausencia de Fafa no era condicionante tan determinante.
La presión sobre el Inter Miami de Javier Mascherano va en aumento. Los fieles de Inter Miami se preocupan por el futuro de la institución mientras los de Lionel Messi por un triste final a su carrera.
Al equipo de Fort Lauderdale lo siguen dos grupos con una división clara, los que seguirán después de Messi y los que no.